Hace unos meses llegó una lámpara imitación Tiffany's a la tienda, estaba algo deteriorada y los colores no me gustaban demasiado.
Me armé de paciencia y rasqué toda la pintura que quedaba en la lámpara, al ser un dibujo con zonas muy pequeñas tuve que rascar cada rincón con un alfiler y me llevó un poco de tiempo.
Una vez eliminada toda la pintura tenía que volver a pintar, pero no quería gastar un montón de dinero en pinturas para cristal, así que después de investigar encontré una solución, esmaltes de uñas.
Busqué unos colores que me gustasen más y rebajándolos con acetona fui pintando como más me gustaba.
El resultado me gusta mucho, los colores son más de mi estilo y en conjunto encaja más con mi tallercito.
¿Qué os parece a vosotras?
Adoro estas lámparas, de hecho tengo una preciosa en tonos anaranjados en el salón de casa.
ResponderEliminarMe gusta mucho como la has transformado y me apunto el tip del esmalte de uñas para pintar el cristal.
Besitos.
Guau! Que paciencia, pero valio la pena porque la lampara cobro nueva vida, te quedo hermosa!
ResponderEliminarBs
¡Qué paciencia, Sandra! Y cuanto ingenio para redecorarla... Lo cierto es que esos colores nuevos nos gustan mucho más, la lámpara luce renovada y más alegre. ¡Gran trabajo!
ResponderEliminarBesos mil de las dos
J&Y
Que linda te ha quedado¡¡
ResponderEliminarY yo ahora que te digo....es que me gustaba como estaba...Besos preciosa.
ResponderEliminar¡Pues me parece genial que te gustara más antes! Por suerte somos muchos en este mundo y con gustos muy diferentes, si no fuera así ¡qué aburrida sería la vida!
EliminarUn beso enorme y feliz semana.